Alimentos que una embarazada no puede comer: A evitar durante el embarazo

El embarazo es una etapa muy importante en la vida de una mujer, y durante este período es fundamental cuidar la alimentación para garantizar el bienestar tanto de la madre como del bebé. Hay ciertos alimentos que una embarazada no puede comer debido a los riesgos que pueden representar para la salud. En este artículo, te contaremos cuáles son esos alimentos y por qué es importante evitarlos durante el embarazo.

Pescado crudo o semicocido

Uno de los alimentos que una embarazada no puede comer es el pescado crudo o semicocido, como el sushi y las ostras crudas. Estos alimentos pueden contener bacterias y parásitos que pueden causar enfermedades como la salmonela o la listeria. Estas infecciones pueden ser especialmente peligrosas durante el embarazo, ya que pueden causar complicaciones graves tanto para la madre como para el bebé.

La listeria, por ejemplo, puede causar aborto espontáneo, parto prematuro o infecciones graves en el recién nacido. Por eso, es importante evitar consumir pescado crudo o semicocido durante el embarazo y optar por opciones de pescado cocido o al horno.

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Quesos blandos no pasteurizados

Otro alimento que una embarazada no puede comer son los quesos blandos no pasteurizados, como el feta, el brie y el queso de cabra. Estos quesos pueden contener bacterias como la listeria, que pueden causar infecciones graves durante el embarazo.

La listeria puede atravesar la placenta y llegar al bebé, lo que puede causar complicaciones graves como aborto espontáneo, parto prematuro o infecciones neonatales. Por eso, es importante optar por quesos pasteurizados durante el embarazo, ya que el proceso de pasteurización elimina las bacterias dañinas.

Carnes crudas o poco cocidas

Las carnes crudas o poco cocidas, incluyendo aves y huevos crudos, también deben evitarse durante el embarazo. Estos alimentos pueden contener bacterias como la salmonela, que pueden causar infecciones graves.

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La salmonela puede causar síntomas como fiebre, diarrea y vómitos, y en casos graves puede causar deshidratación y complicaciones para el bebé. Por eso, es importante asegurarse de que las carnes estén bien cocidas antes de consumirlas durante el embarazo.

Jugos o leche no pasteurizados

Los jugos o leche no pasteurizados también deben evitarse durante el embarazo. Estos productos pueden contener bacterias como la salmonela o la E. coli, que pueden causar infecciones graves.

La salmonela y la E. coli pueden causar síntomas como fiebre, diarrea y vómitos, y en casos graves pueden causar complicaciones para la madre y el bebé. Por eso, es importante optar por jugos y leche pasteurizados durante el embarazo.

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Fiambres, embutidos, carnes frías, pescados o mariscos ahumados y salchichas sin calentar

Los fiambres, embutidos, carnes frías, pescados o mariscos ahumados y salchichas sin calentar también deben evitarse durante el embarazo. Estos alimentos pueden contener bacterias como la listeria, que pueden causar infecciones graves.

La listeria puede causar complicaciones graves durante el embarazo, como aborto espontáneo, parto prematuro o infecciones neonatales. Por eso, es importante asegurarse de que estos alimentos estén bien calentados antes de consumirlos durante el embarazo.

Ensaladas ya preparadas con carnes crudas

Las ensaladas ya preparadas con carnes crudas, como la ensalada de jamón, la ensalada de pollo o la ensalada de mariscos, también deben evitarse durante el embarazo. Estas ensaladas pueden contener bacterias como la salmonela o la listeria, que pueden causar infecciones graves.

Es importante recordar que las carnes deben estar bien cocidas antes de consumirlas durante el embarazo, y evitar las ensaladas ya preparadas que puedan contener carnes crudas.

Brotes crudos

Los brotes crudos, como la alfalfa, el trébol, el rábano o los brotes de frijol mungo, también deben evitarse durante el embarazo. Estos brotes pueden contener bacterias como la salmonela o la E. coli, que pueden causar infecciones graves.

La salmonela y la E. coli pueden causar síntomas como fiebre, diarrea y vómitos, y en casos graves pueden causar complicaciones para la madre y el bebé. Por eso, es importante asegurarse de que los brotes estén bien lavados y cocidos antes de consumirlos durante el embarazo.

Cafeína en exceso

La cafeína en exceso también debe evitarse durante el embarazo. El consumo excesivo de cafeína se ha asociado con un mayor riesgo de aborto espontáneo, parto prematuro y bajo peso al nacer.

La cafeína se encuentra en el café, el té, el chocolate y algunas bebidas energéticas. Se recomienda limitar el consumo de cafeína a no más de 200 miligramos al día durante el embarazo.

Azúcares añadidos en exceso

El consumo excesivo de azúcares añadidos también debe evitarse durante el embarazo. El consumo excesivo de azúcares añadidos se ha asociado con un mayor riesgo de diabetes gestacional, aumento de peso excesivo y complicaciones para el bebé.

Es importante leer las etiquetas de los alimentos y evitar aquellos que contengan altas cantidades de azúcares añadidos. Optar por una alimentación equilibrada y saludable durante el embarazo es fundamental para garantizar el bienestar tanto de la madre como del bebé.

Alcohol en cualquier cantidad

Por último, el consumo de alcohol debe evitarse por completo durante el embarazo. El alcohol puede atravesar la placenta y llegar al bebé, lo que puede causar daños irreversibles en su desarrollo.

El consumo de alcohol durante el embarazo se ha asociado con un mayor riesgo de aborto espontáneo, parto prematuro, malformaciones congénitas y retraso en el desarrollo del bebé. Por eso, es fundamental abstenerse por completo de consumir alcohol durante el embarazo.

Durante el embarazo es importante evitar ciertos alimentos que pueden representar riesgos para la salud de la madre y el bebé. Alimentos como el pescado crudo o semicocido, los quesos blandos no pasteurizados, las carnes crudas o poco cocidas, los jugos o leche no pasteurizados, los fiambres, embutidos, carnes frías, pescados o mariscos ahumados y salchichas sin calentar, las ensaladas ya preparadas con carnes crudas, los brotes crudos, la cafeína en exceso, los azúcares añadidos en exceso y el alcohol en cualquier cantidad deben evitarse durante el embarazo para garantizar el bienestar de la madre y el bebé.